Salarios vs canasta básica: un análisis del poder adquisitivo de los argentinos

Un informe elaborado por la consultora Focus Market muestra la pérdida del poder adquisitivo a través del salario de los argentinos medido en dólares, que se evidencia en la capacidad de comprar una canasta básica.

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“A pesar de que aún existen numerosos retos que enfrentar, se empieza a percibir una cierta estabilización en la economía argentina. Si bien la inflación sigue presente, está más controlada en comparación con los niveles elevados de 2023, y las perspectivas apuntan a que este control se mantendrá en el futuro cercano de avanzar en un acuerdo con el Fondo Monetaria Internacional con ingreso de dólares en reservas del Banco Central de la República Argentina”, expresó Damián Di Pace Director de la Consultora.

En diciembre de 2023, Argentina atravesó un proceso de devaluación significativo que tuvo un impacto directo en el poder adquisitivo.

Una de sus contrapartes, fue el efecto en los salarios: el salario promedio registrado se redujo un 11,4% en tan solo un mes, lo que representa la mayor caída mensual de los últimos 30 años. Para ilustrar esta situación, tomamos los valores de la Remuneración Imponible Promedio de los Trabajadores Estables (RIPTE) correspondientes a noviembre y diciembre de 2023, medidos al tipo de cambio oficial.

En el período de análisis, el dólar oficial pasó de $378 a $847, lo que representó un aumento del 124% y una devaluación del peso argentino frente al dólar del 54%. La misma tuvo un efecto directo en el salario promedio, que cayó de USD 1.378 a USD 992. Esto implicó una reducción del 28% en el salario medido en dólares, aceleración inflación y pérdida poder adquisitivo.Como contracara, en el mismo período de 2024, el tipo de cambio oficial se mantuvo relativamente estable, lo que permitió que el salario promedio pase de USD 1.368 en noviembre 2023 a  USD 1.383 en diciembre 2024 recuperando el terreno perdido.

El comportamiento del salario medido en dólares también puede reflejarse en la capacidad de compra de la canasta básica, que incluye los productos y servicios esenciales que requiere una familia tipo (2 adultos y 2 niños). En noviembre de 2023, con el salario promedio, una familia podía adquirir 2,99 canastas básicas totales y 2,82 canastas alimentarias. Sin embargo, para diciembre 2023 era posible adquirir 1,70 canastas totales y 3,49 alimentarias, como consecuencia de la suba del tipo de cambio. Al finalizar 2024, el salario promedio fue suficiente para adquirir una canasta básica total y hasta tres canastas alimentarias, lo que refleja una mejora en la accesibilidad a los productos básicos necesarios para una vida digna.

En de Noviembre a Diciembre 2023, la mayoría de los cortes de carne experimentaron disminuciones de entre el 36% y el 50% medido en dólar oficial pos devaluación. Al llegar a finales de 2024, los aumentos en los precios de las carnes variaron entre un 2% y un 16%. A pesar de que la inflación actual se encuentra cerca del 2%, estos aumentos se “explican” por el atraso en los precios respecto a los altos niveles de inflación previos.

“La devaluación del peso frente al dólar ha disminuido su ritmo, con una variación mensual cercana al 1%, lo que permite una mayor previsibilidad para los próximos meses. Por su parte, el consumo masivo está siendo uno de los sectores más postergados en su crecimiento debido a los procesos de stockeo por parte de las familias que se dieron hasta el primer semestre 2024 por lo cual al medir los volúmenes de compra caen en forma interanual y probablemente sea lenta su recuperación en los próximos meses”, detalló Di Pace.

En el siguiente gráfico se muestra cómo variaron los precios de noviembre de 2023 a diciembre de 2024 en porcentaje. Medido en dólares hoy los diferentes tipos de carnes en Diciembre 2024 están más económicos que en Noviembre 2023 pre devaluación. Sin embargo, en enero y febrero 2025 presentaron aumentos promedios del 15% con un tipo de cambio estable incrementándose sus precios en dólares también.

En el caso de otros alimentos básicos necesarios, que además suelen caracterizarse por ser accesibles, también disminuyeron sus precios en dólares post devaluación. Durante el período de noviembre-diciembre 2023, el pan disminuyó un 44,9%, la harina de trigo y el arroz bajaron un 32 y 31,8%, mientras que la leche entera lo hizo un 39,9%. Al comparar con el mismo período pero en 2024, se observan estabilización en los precios, lo que refleja un alivio en la presión sobre los precios y con sinceramiento de los mismos.

En el siguiente gráfico se refleja la variación porcentual de los precios medidos en dólares, de noviembre de 2023 a diciembre de 2024. Cabe mencionar que en el caso del litro de leche, un aumento del 14% medido en dólares, es un nivel muy alto.

A pesar de que aún existen numerosos retos que enfrentar, se empieza a percibir una cierta estabilización en la economía argentina. Si bien la inflación sigue presente, está más controlada en comparación con los niveles elevados de 2023, y las perspectivas apuntan a que este control se mantendrá en el futuro cercano. Además, la devaluación ha disminuido su ritmo, con una variación mensual cercana al 1%, lo que permite una mayor previsibilidad para los próximos meses.

Por su parte, el consumo masivo está siendo uno de los sectores más postergados en su crecimiento debido a los procesos de stockeo por parte de las familias que se dieron hasta el primer semestre 2024 por lo cual al medir los volúmenes de compra caen en forma interanual y probablemente sea lenta su recuperación en los próximos meses. Aunque el camino hacia una recuperación completa sigue siendo largo, estos signos de estabilidad ofrecen un panorama más optimista y la posibilidad de una mejora gradual en el poder adquisitivo y en la economía en general.

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