ARGENTINA, EL PAÍS QUE MÁS SUBIÓ LA PRESIÓN IMPOSITIVA

La presión tributaria local es muy similar a la de los países de la OCDE, pero las prestaciones son muy inferiores.

Durante el período 1990-2016, la mayoría de los países de Latinoamérica experimentó un marcado crecimiento de la carga tributaria medida como porcentaje del PBI. En efecto, la presión tributaria promedio de los países de la región pasó de niveles cercanos al 16% del PBI en el período 1990-1994, a superar el 22% del PBI en el año 2016. Es decir que el aumento del peso de los impuestos estuvo en el orden del 37%.

A nivel de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), por el contrario, la presión tributaria se mantuvo relativamente estable en igual período, oscilando entre un 32% y un 34% del PBI. Es evidente que estos niveles resultan sustancialmente más elevados que el promedio de la región de Latinoamérica y el Caribe (LAC).

Para describir la dinámica argentina es importante dividir a todo el período en dos. En primer lugar, a lo largo del período 1990-2002, la carga tributaria efectiva de la Argentina se encontraba en niveles similares al promedio de sus pares latinoamericanos, con valores que partieron de un 13,7% del PBI en 1990 y llegaron a un 18,4% en el año 2002. Desde este año, la situación cambia sustancialmente, comenzando a aumentar la presión tributaria a un ritmo muy superior al del promedio de la región latinoamericana. En efecto, en el año 2016 la presión tributaria de Argentina alcanza según la OCDE un 31,3% del PBI, nivel mucho más cercano al promedio de los países que la integran (34,3%) que al de América Latina (22,7%).

Si se analiza el crecimiento acumulado individual de cada país entre los años 1990 y 2016, se observa que gran parte de los países latinoamericanos evidenciaron subas en la presión tributaria, si bien la magnitud de dichos cambios fue bastante heterogénea.

Considerando el período 1990-2016, la Argentina fue el segundo país de mayor crecimiento, con una variación de 17,6 puntos porcentuales del PBI, luego de Bolivia que experimentó un crecimiento de su carga tributaria de 17,7 puntos porcentuales. Por su parte, el crecimiento promedio de la carga tributaria para todos los países de Latinoamérica fue de 6,7 puntos porcentuales, mientras que en los de la OCDE la variación fue de solamente 2,3 puntos porcentuales. Es decir que la carga tributaria efectiva argentina subió casi dos veces más que la de toda Latinoamérica.

Si bien Argentina aumentó su carga tributaria 17,6 puntos porcentuales del PBI entre 1990 y 2016, el 70% de ese aumento se registró entre los años 2002 y 2016, convirtiéndose en el país que más incrementó la presión fiscal en ese período. La suba fue de 12,9 puntos porcentuales, superando la suba promedio de los países de Latinoamérica (4,6 puntos porcentuales) y la de los países de la OCDE que registraron las mayores subas, como Grecia (6,3 puntos porcentuales) y Corea del Sur (4,4 puntos porcentuales).

En definitiva, luego de la dinámica descripta, la presión tributaria argentina alcanzó el 31,3% del PBI en 2016. De esta manera, al último año de medición comparada disponible, ocupó el cuarto puesto luego de Cuba (41,7%), Barbados (32,2%) y Brasil (32,2%).

Por qué suben los impuestos

Los principales dos factores que explican el sustancial aumento de la presión tributaria efectiva de Argentina entre los años 2002 y 2016 son la seguridad social nacional y el impuesto al valor agregado (IVA), con aumentos de 4,18 y 2,95 puntos porcentuales del PBI respectivamente entre un año y otro. En tercer lugar se ubica el impuesto a las ganancias (2,75 puntos porcentuales), seguido del tributo provincial más importante, el impuesto sobre los ingresos brutos (IIBB), con 2,14 puntos porcentuales.

Excluyendo a la seguridad social, se aprecia que la estructura tributaria se hizo más regresiva, creciendo el IVA y el IIBB en conjunto en mayor magnitud que el impuesto a las ganancias.

Respecto a la seguridad social nacional, es importante destacar que a fines de 2008 se estatizaron las AFJP, lo que significó un traspaso de recursos equivalente a 1,2% del PBI. De este modo se entiende que de los 4,18 puntos porcentuales que subió este componente, una porción tiene su explicación en el salto de ingresos derivado de la estatización de las AFJP.

Contracara: el peso del gasto público

La presión tributaria es el correlato del nivel de gasto público de un país. Un tamaño del Estado creciente debe ser financiado por alguna vía, siendo la de la presión tributaria la principal.

En el año 2002 el gasto público consolidado de Argentina era equivalente al 24,8% del PBI, mientras que en el 2016 alcanzó un nivel relativo del 42,4% del PBI. Esto significa que el peso de las erogaciones de los tres niveles de gobierno se incrementó 17,6 puntos porcentuales en ese período, o, desde otro punto de vista, casi un 70%.

El principal componente que explicó este incremento es el gasto en personal, con una suba de 4,8 puntos porcentuales. Le siguieron en orden de importancia el gasto en seguridad social nacional y las transferencias corrientes al sector privado, con crecimientos de 4,1 y 3,9 puntos porcentuales, respectivamente.

Desde el punto de vista de la composición, puede apreciarse que aproximadamente el 85% del aumento del gasto estuvo explicado por gastos corrientes, generando un salto de nivel que siguió requiriendo financiamiento.

La discusión fiscal actual

La dinámica fiscal de Argentina de los últimos años derivó en una estructura insostenible: alto peso del gasto público, alto peso de los impuestos y alto peso del déficit. La baja del peso del gasto público aparece como una condición necesaria para sanear las cuentas. El actual gobierno optó por la reducción gradual del gasto financiando el déficit remanente con endeudamiento. Esta estrategia inicial no pudo sostenerse y ahora se decidió acelerar la reducción del déficit primario, planteando su eliminación para 2020.

La discusión política está comenzando. La sanción de la ley de presupuesto 2019 es el marco del debate. (Fuente: Clarin)

23 de Julio (Valor Local)