TIENE AMPLIO ACUERDO EL CONTROL GUBERNAMENTAL SOBRE PRECIOS Y SERVICIOS

Un relevamiento mostró que el 86 por ciento de los encuestados se mostró de acuerdo con que el Gobierno nacional debería controlar los precios de los alimentos y los servicios básicos · Este consenso no es algo coyuntural, sino que siempre ha registrado altos niveles entre los argentinos, indicó Brenda Lynch de la consultora Ipsos, responsable de la medición · El dato está en línea con las tres principales preocupaciones argentinas: inflación, desempleo y pobreza.

La encuestadora consultó el grado de acuerdo con la frase: “El Gobierno nacional debería controlar los precios de los alimentos y los servicios básicos”. El 62 por ciento se mostró “muy de acuerdo” y el 24 por ciento “algo de acuerdo”, mientras que solo un 11 se mostró en desacuerdo. El relevamiento se realizó durante junio pasado y los resultados se conocieron un mes después, sobre una muestra de un mil casos en cuya selección se respetaron niveles de sexo, edad, nivel socioeconómico y lugar de residencia.

“Es una pregunta que venimos haciendo hace bastante tiempo y es algo que siempre ha dado alto entre los argentinos”, explicó Lynch, directora de Cuentas y Comunicación de la firma internacional.

Además, comentó durante la anterior gestión nacional “en la opinión pública también había un acuerdo con esta frase” que implica que el Gobierno “tiene que estar al tanto, presente imponiendo condiciones en cuáles son los precios de los alimentos y servicios básicos”, dijo.

En el desagregado por edad, nivel socioeconómico, región y aprobación/desaprobación del Gobierno nacional, el porcentaje de acuerdo se mantiene en los mismos niveles. Lynch resaltó: “El 86 por ciento es un nivel muy alto, por lo cual claramente abarca todos los segmentos, es un consenso mayoritario. Sí hay una variación en género, que da 82 por ciento en el caso de los hombres y 90 por ciento en las mujeres; ellas se están mostrando más proclives, más de acuerdo con esta frase. En los sectores de menores ingresos, existe también mayor acuerdo. Son variaciones muy pequeñas, no significativas que aparecen en el estudio”.

Este dato se entronca con otro que aporta otro relevamiento de la misma consultora, donde se muestra que los tres principales problemas para los argentinos son inflación, desempleo y pobreza.

Lynch aclaró: “No somos de hacer una relación directa, porque son dos encuestas distintas, pero como siempre entrevistamos a población general en Argentina vemos la relación que hay entre una preocupación por temas económicos y que el control que pueda ejercer el Gobierno es bien visto”.

Por otra parte, entre abril y julio de este año, la caída del índice de confianza del consumidor (Ipsos-Reuters) fue marcada: del 47,6 al 38,6 por ciento. Este dato se construye sobre cuatro subíndices: confianza en mantener el empleo, seguridad para realizar inversiones o compras, evaluación de la economía actual, evaluación de las expectativas a futuro.

En agosto, la baja se acentúa y desciende un par de puntos más, adelantó Lynch. “Vemos una tendencia que se viene registrando desde hace bastante ya tanto en la caída de la confianza del consumidor como en la aceptación de la gestión (de Mauricio Macri)”, reseñó.

“Ha caído mucho la expectativa de que las cosas van a estar mejor en los próximos seis meses y es uno de los indicadores que están tirando para abajo el índice”, precisó Lynch. “La evaluación de la economía no venía siendo buena desde la época de (la ex presidenta) Cristina (Fernández de Kirchner). Macri asume con un nivel de aprobación de la economía muy bajo, lo que sí era alta era la expectativa de que las cosas iban a mejorar en corto, mediano plazo y ahora ha caído bastante esa evaluación”, concluyó. (Fuente: APF)

06 de Septiembre (Valor Local)